MAMÁ: GRACIAS A QUE EN UN DIA COMO HOY VINISTE AL MUNDO...

...hoy puedo ver estos inquietos y brillantes ojos y deleitarme con esta maravillosa sonrisa. Por eso no puedo menos que dedicarte al menos una palabras que sé que las escuchas porque sigues viva en mi corazón y en el de muchos otros. Para mi mamá TODAS EN UNA aprovechando la ocasión. Cristalinas, transparentes…puedo sentirlas cuidando mis pasos… y no se alejan. Bendicen la esencia de mi alma, la pureza de mi plenitud: sus pensamientos. Viven..puedo sentirlas, existen como destellos constantes de energía, como chispas que cantan y bailan a mi alrededor: es la vida. Por momentos las dimensiones se confunden…abriendo los caminos escondidos entre espacio y espacio, entre tiempo y tiempo. El más allá viene hasta acá a través del viento, la luz y la oscuridad, cruzan fronteras por el amor verdadero, ese hilo conductor de eternidad. …Pedirle al Universo…Qué pedirle al Universo? Que fluya la energía hacia todos los tiempos? Hacia dimensiones paralelas donde vivimos lo que nunca llegó, donde las decisiones que tomamos no son las mismas que no llevaron a este “ahora” y a estas circunstancias? NO, ESO NO…todo es perfecto como pasó. Mejor sumergirse en la realidad, en lo profundo del océano, en su colorido, en su frescura… Mejor bailar…bailar desnuda al sonido de las olas, del aire. Mejor entregarnos a la bendición de la naturaleza como reflejo del amor perfecto que Dios nos da y nos transmite día a día para que sintamos terrenalmente todas sus manifestaciones.